Salvatore Ferragamo no era para mi más que otro nombre dentro de la moda italiana. Tras leer su historia ahora la marca tiene otro significado para mi.
Hace 100 años en la Italia rural el niño Salvatore demostró a su humilde familia su pasión por el calzado, regalando a su hermanita por su Primera Comunión unos maravillosos zapatos blancos que hizo para ella con la ayuda del zapatero del pueblo. En pocos años Ferragamo vestía los pies más famosos del cine, la realeza y las grandes fortunas del mundo.
La empresa sigue siendo familiar y solo los mejores de cada generación acceden a ella conservando la tradición en todos los procesos de fabricación tanto en calzado, moda y complementos demostrando en cada pieza el amor por el trabajo bien hecho.
Besos 4 breakfast
Jimmy Trash
